Amocáin está situado en la localidad de Elía, en el Valle de Egüés (Navarra). Actualmente es una propiedad privada y sus edificios están en ruinas. Era un señorío con casa de buena factura con paredes de piedra (en la que, según la tradición, vivió Felicia), pequeña iglesia propia adyacente (a modo de ermita), pajar, era y tierras circundantes.
Amocáin en el Misterio de Obanos:
- Felicia decide quedarse como sirvienta en el Señorío de Amocáin, a las órdenes de los dueños de dicha casa.
- Su hermano la encontrará aquí y, por no querer entrar en razón y regresar con él a Aquitania, le dará muerte.
- El cuerpo de Felicia será enterrado en la pequeña ermita (iglesia, según la leyenda) de Amocáin: «en la iglesia de Amocáin / a la mártir enterraron. / Cuidaban su humilde tumba con amor sus viejos amos«
- Se obran milagros: nace un clavel del cuerpo de Felicia («cuando una mañana vieron / que un hermoso clavel blanco / en la tapa del sepulcro / brotaba igual que en el campo. / (…) al descubrirse, con santo / temor, que el clavel nacía / fragante, esbelto y lozano / de la herida, fresca aún, / su misterio descifrando«); su arca sale sola de la iglesia al campo («El arca quedó en el tempo / de los fieles al cuidado, / más una noche de estrellas / cruzó, por si sola, el atrio. / (…) Halláronla abandonada / como una gavilla al raso«); no la pueden levantar para regresarla a la iglesia («Diligentes y gozosos / tornarla al templo intentaron, / más no pudieron moverla. / ¡El arca pesaba tanto!«); y se hace ligera al mandado del obispo de ponerla sobre una mula para que ella, por designio divino, elija el lugar donde deberá ser depositada Felicia («Juzgando providencial / lo que ocurría, el prelado / mandó que sobre una mula / la pusiesen en el acto, / dejándola a rienda suelta / para que, como al acaso, / señalara Dios al féretro / el sitio de su descanso / (…) El arca se hizo ligera / al episcopal mandato«).
- Amocáin tiene su propio decorado arquitectónico dentro de la plaza de los Fueros, donde se escenifica la obra ya que en 1965 se construyó la Hospedería de Arnotegui (que entraría en funcionamiento como tal en 1967), cuya fachada estuvo claramente inspirada en el caserío original, actualmente en ruinas, del caserío de Amocáin (Elía) donde supuestamente sirvió y murió Felicia. No se trata sólo de una fachada sino de un edificio completo que sirvió de casa de habitaciones y de comidas durante un par de décadas. Actualmente alberga la Casa de Cultura del Ayuntamiento de Obanos.